Coordinadores: Mònica Figueras Maz (profesora de la Universitat Pompeu Fabra y directora Sección Estudios de Audiencia y Recepción de la AE-IC); Iolanda Tortajada (profesora de la Universitat Rovira i Virgili y coordinadora sección Estudios de Audiencia y Recepción de la AE-IC) y Alejandro Barranquero (profesor de la Universidad Carlos III de Madrid y director Grupo Temático Comunicación y Ciudadanía de la AE-IC).

 

En los últimos años, la rápida expansión de las tecnologías informacionales y la reorganización de la sociedad civil proporcionan un nuevo contexto de oportunidades para la construcción de procesos críticos de recepción y apropiaciones mediáticas ciudadanas. La nueva coyuntura sociopolítica e infotecnológica favorece un nuevo marco de oportunidades para que los públicos tradicionales, antes actores pasivos del proceso informacional, se conviertan en audiencias activas que reinterpretan, vigilan, negocian e incluso se apropian de las tecnologías a su alcance para proporcionar feedback a los medios o de cara a construir relatos autónomos en torno a sus imaginarios, valores y modos de vida. 

Si el mercado de los grandes medios, la publicidad y las industrias culturales aboca a una concepción de la ciudadanía como mera consumidora pasiva de información, hoy son cada vez más los individuos, colectivos, movimientos sociales y asociaciones de la sociedad civil que se organizan y reclaman una participación activa en el sistema mediático. Desde estas instancias se hace pues posible redimensionar la labor de unos medios que tradicionalmente se han agotado en lo meramente representativo y que poco a poco transitan o deben transitar hacia mayores cuotas de participación, calidad y servicio público. Hablamos pues de nuevas prácticas de producción, distribución y recepción mediáticas que contribuyen a que la ciudadanía se autorrepresente, escriba sus propios relatos y reclame derechos, necesidades y demandas no siempre atendidas por los medios generalistas.

Hoy en día son muchas las potencialidades mediáticas y tecnológicas que favorecen la articulación de una ciudadanía informada, crítica e independiente. Los medios públicos, comerciales y comunitarios ofrecen mecanismos (más o menos unidireccionales u horizontales) para que individuos y comunidades se expresen, ya no como meros espectadores o consumidores, sino como sujetos que reclaman su condición ciudadana mediante el uso y la apropiación de la palabra, el sonido o la imagen. A menudo, estas producciones nacen en espacios no hegemónicos. Otras veces, los públicos consiguen abrir brechas participativas en los grandes medios de cara a hacer circular sus mensajes e imaginarios entre públicos mayoritarios.

Este número especial constituye un necesario un espacio de reflexión, diálogo y problematización acerca de las profundas mutaciones que hoy atraviesa el estudio de las audiencias y recepciones desde la perspectiva del derecho a la comunicación y desde valores como la democracia, los objetivos del desarrollo sostenible o la justicia social y ecológica.

Publicado: 10-02-2020

Número completo

Miscelánea

Novedades editoriales